jueves, 31 de agosto de 2017

A 30 años del secuestro de Carreño: Dónde está Manuel?

Manuel, emprende la huida a pie. Logra perder al furgón que lo sigue. Se aleja unos cien metros de sus perseguidores. Escucha los ruidos y gritos, de varios autos y hombres armados. Cuando cree que ha logrado burlar su presencia, se encuentra de frente con sus captores.

Hace 30 años, Santiago era muy distinto al de hoy. En la calle Simón Bolívar de La Reina, todo era silencio. El paso de un par de autos rompió con la pesadumbre y la leve brisa húmeda de esa mañana. Exactamente a las 07.15 horas, Carlos Carreño, se arregla la ropa, camina entre la puerta de su casa y una pequeña reja, hasta llegar a la calle. De pronto se ve encañonado por seis hombres, que lo obligan a subir a un furgón utilitario celeste. De esa manera comenzaría un camino sin retorno, repleto de sorpresas, angustias y situaciones jamás imaginadas.

El general Pinochet, sentado en su escritorio frente a dos altos oficiales, se entera del plagio del Coronel Carreño, hombre clave en las exportaciones de armas y equipos de FAMAE, y que había recibido a los iraníes en Santiago de forma secreta, para vender minas y aviones de manera encubierta y sortear de esa manera el bloqueo estadounidense.

La primera reacción del dictador, fue culpar a la FACH. Afirmó que siempre el diablo intenta meter la cola, - y agregó- con el propósito de vender sus propios aviones a clientes árabes.  La FACH y el empresario Carlos Cardoen, vendieron bombas a Irak y eso irritaba a Pinochet y al Ejército.
Después de un rato, de esa reunión salió un orden concreta y tajante. Busquen al oficial Carreño y tráiganlo a mi presencia, ordenó Pinochet. En voz tranquila, pero firme agregó: No importa su estado de salud o condición física.

Pasaron los días. Sin embargo, su orden no pudo cumplirse. Al subdirector de Famae, se lo había tragado la tierra. Miles de militares fuertemente armados, patrullaban las calles y un bloque de búsqueda revisaba miles de hogares sin éxito.

El día lunes 8 de septiembre del año 1987, en el Cuartel de Borgoño de la CNI, la inteligencia militar del Ejército en pleno, y luego de varias dudas y supuestas certezas, llegaron a la conclusión de manera frenética, sobre la hipótesis, para entender el secuestro.

 La primera, la dijo el propio Álvaro Corbalán, Jefe Operativo de la CNI: “Esta hueva, es un autosecuestro y este hueón,  se quiere pasar de listo y quedarse con los seis millones de dólares que piden por su rescate”. Varios de los asistentes, lo miraron y aceptaron su idea, con un movimiento de cabeza.

La segunda teoría, más acorde con el oficial cautivo, la defendió el Jefe de la DINE, que luego de pasar sus gruesos dedos por el bigote, sentenció: “Yo creo que pueden ser los israelitas, los del Mossat, “los Katzas” que buscar información sobre las negociaciones con los árabes”. Nosotros tenemos velas en esté entierro, recuerden las ventas de bombas de racimos al propio Ayatola Jomeiní, apuntó con vehemencia el oficial.

Pero hubo una tercera opinión en la sala. Según mi información, expuso el agente, y por información de la propia esposa, Loreto Rojas, el FPMR se comunicó con ellos, el día viernes 4 de septiembre, vía telefónica. Llamó una mujer y les indicó que mi Coronel está bien de salud y enviaron una fotografía como prueba, concluyó el militar.

Ese mismo día, comienza la casería humana. Manuel Sepúlveda, un joven de 28 años, detuvo su moto amarilla y la estacionó a un lado del kiosco azul de diarios en la calle Narbona, con Ramón Cruz, en Ñuñoa. Eran las 18.05 horas. Mientras mueve con su pierna la palanca de la moto, otea como un furgón utilitario de color celeste,  intenta frenar bruscamente, doblando en u, por debajo del puente de cemento.

 Manuel, emprende la huida a pie. Logra perder al furgón que lo sigue, medio corriendo entre los edificios del sector, se aleja unos cien metros de sus perseguidores. Escucha los ruidos y gritos, de varios autos y hombres armados. Cuando cree que ha logrado burlar su presencia, sale hacia la calle Américo Vespucio y se encuentra de frente con sus captores. Otros cuatro jóvenes, fueron detenidos en Santiago en iguales condiciones: José Peña; Julio Muñoz; Alejandro Pinochet y Gonzalo Fuenzalida.

Días después, dos altos oficiales que conocían al Coronel Carreño solicitaron una reunión para intentan persuadir a Pinochet que pagara el dinero del rescate y salvará la vida de oficial de 39 años. El dictador los miró con cierto desprecio y les informó que no hay negociación de dinero por el Coronel. “Sí lo matan, lo matan no más”. Estupefactos y choqueados, los amigos de Carreño,se retiran de las oficinas de la Comandancia en Jefe.

A finales del mes de septiembre, en el Cuartel de Borgoño de la CNI, no hay información alguna del Coronel Carreño. Los torturadores han aplicado todo tipo de tormentos, a los 5 detenidos, pero no logran saber nada al respecto. Se equivocaron de personas. Ninguno de los detenidos pertenecían al FPMR- A, que recientemente se había fraccionado del Partido Comunista.

¿Qué hacer entonces con los 5 jóvenes? La respuesta llegaría del más alto nivel del Ejército. Pinochet, ordena que no haya intercambio, ni negociación posible. Hay que eliminar a los cinco. El operativo comienza de inmediato. Los detenidos están en pésimas condiciones, algunos incluso agónicos.

El agente civil, Mateo Tapia Flores, conocido en la CNI como “El Quincy”, encontró a Manuel Sepúlveda colgado de las manos en uno de los calabozos, con su cuerpo medio desnudo y su rostro ensangrentado. Aún mantenía  su camiseta blanca puesta. A unos dos metros, estaban su jeans y sus botas color café.

“El Quincy” lo miró y desde lejos le golpeó en el abdomen tres veces con un trozo de madera. No hubo reacción alguna de parte de la víctima, que seguía con su cabeza agachas. No dudo un instante y le aplicó una inyección letal. Igual suerte corrieron los otros cuatro jóvenes

 Esa misma mañana, el propio helicóptero de Pinochet, con Víctor Campos, su piloto de confianza se eleva desde el aeródromo de Tobalaba, para cruzar todo Santiago, con destino al Centro Militar de Peldehue. En ese lugar, lo esperan varios agentes de la CNI. En el piso metálico del Puma  H-258 perteneciente al Ejército de Chile, son depositados los 5 cuerpos. La nave color verde se eleva, dejando una inmensa polvareda a su paso. Luego enfila hacia Tiltil, cruza el Monumento a Manuel Rodríguez; y la cuesta La Dormida y llega al sur de Olmue. Es el último paso por Valparaíso de Manuel y Alejandro, dos jóvenes porteños, que recorren los cerros, en una despedida involuntaria.

El ruido enorme de la pesada nave, finalmente se perdió entre las caletas de Tunquen y Quintay, en la costa de Valparaíso, unos 10 kilómetros mar adentro. La puerta lateral derecha del Puma H-258 se abrió. Los cuerpos de los 5 jóvenes, fueron lanzados uno a uno, al fondo del mar. El hombre encargado de cerrar a puerta, tropezó con el riel de Manuel y estuvo a punto de caer al mar. El arrastre de los rieles, mezclado con el airé que entró de golpe al helicóptero, desestabilizó la nave. La pericia del “Chino” Campos, salvo la situación. El H-285, se pudo estabilizar y emprendió su vuelo de regreso hacia Santiago.

En tanto, el Coronel Carreño, continuaba sin aparecer. A finales del mes de noviembre, inició un viaje por tierra, acostado en el fondo de una camioneta, dormido por un sedante. Despertó en territorio argentino. Sus captores cantaban la canción nacional como un signo de haber salido de Chile, sin ser detectados.  Carlos Carreño, se alegró. Lo único que no deseaba, era ser rescatado por sus compañeros de armas. Tenía certeza absoluta que de ocurrir algo así, no escaparía de la muerte.

Carlos Carreño, se dio cuenta que estaba en Argentina. Sus captores seguían amables y hasta conversaban de política y de la vida cotidiana. Pero un día todo eso cambio. Fue interrogado y firmado. Las preguntas cambiaron. Está vez, eran muy específicas sobre las negociaciones de armas de FAMAE y de las tratativas con los  iraníes. El Coronel respondió lo que pudo, pero el cuestionario le pareció demasiado familiar.

El día 3 de diciembre del año 1987, Carlos Carreño es liberado finalmente en Brasil. A las 16.00 horas se presenta en un periódico local de Sáo Paulo. Elegantemente vestido, pero bastante delgado, declaró que lo han tratado bien y que lo único que desea es volver junto a su familia. Años después Carlos Carreño, declaró que está convencido que su secuestro, fue monitoreado por la inteligencia del Ejército.  La prueba que entrega para afirmar su sospecha, es que estando en las oficinas del DINE, en calle Republica, sus superiores le mostraron el video del interrogatorio en Argentina. Había pasado menos de un mes.


A 30 años del secuestro, el Coronel Carreño, sabe que su vida cambió para siempre en sólo seis meses. Estuvo tres meses cautivo y una vez liberado el Ejército le curso la baja, en otros tres meses más. Por su parte, Manuel  y los otros cuatro jóvenes, aun permanecen desaparecidos. Son los últimos desaparecidos de la dictadura. 

miércoles, 23 de agosto de 2017

Renuncia del General Prats

¿Sabías  qué? Un día como hoy, 23 de agosto del año 1973, renunció el General Carlos Prats, a la Comandancia en Jefe del Ejército y al cargo de Ministro de Defensa Nacional.
En su carta de dimisión expreso: Al apreciar en estos últimos días que quienes me denigraban habían logrado perturbar el criterio de un sector de la oficialidad del Ejército, he estimado un deber de soldado de sólidos principios no constituirme en factor de quiebre de la disciplina institucional y de dislocación del Estado de Derecho, ni servir de pretexto a quienes buscan el derrocamiento del Gobierno institucional”

Los generales Mario Sepúlveda y Guillermo Pickering, renuncian, demostrando su solidaridad y lealtad con el General Prats.  El general Prats, recomienda al Presidente Salvador Alllende, que su sucesor sea Augusto Pinochet, dada su hoja de servicio como soldado profesional y apolítico. El resto de la historia es conocida.

martes, 22 de agosto de 2017

Qué dirá Don Francisco?

¿Sabías qué? 348 profesionales de la Teletón están en huelga legal desde hace 5 días. Es la primera huelga en toda su historia como institución. El sindicato reúne al 80 % de los profesionales de los 14 centros del país. Mientras el sindicato pide un aumento de un 5 % en sus remuneraciones, la empresa les ofrece un 1,5 %. Además, el sindicato pide una hora de almuerzo y la empresa no cede a esa demanda que elevaría la calidad de vida de los profesionales. Los dirigentes denuncian que los canales abiertos tienen un cierto bloqueo mediático. ¿Qué dirá Don Francisco de todo esto?

lunes, 21 de agosto de 2017

Un día como hoy (1973)

Un grupo de esposa de los generales del Ejército de Chile, llegan hasta la casa del General Carlos Prats y protestan airadamente en su contra. Junto a las mujeres participan varios oficiales vestidos de civil y un uniformado con su tenida de militar. El general Prats, solicita apoyo público a su cuerpo de generales, cuestión que no sucede con la amplitud requerida. Renuncia a la Comandancia en Jefe del Ejército, y como de Ministro de Defensa del gobierno de Salvador Allende, dos días después de este incidente. 

El desborde que amenaza al Frente Amplio


Todos coinciden que está es la primera crisis seria del FA. Lo que nadie sabe es cuánto durará. Dependerá en gran medida de las fortalezas colectivas que demuestren sus dirigentes nacionales.



¿Qué le pasa al Frente Amplio?  A menos de 2 meses de su emergente irrupción en el campo electoral, con una exitosa franja televisiva, hoy contracta con el mal manejo político en su plantilla electoral, que  tienen a la joven coalición política sumida en una crisis de liderazgos.

El no saber tratar las diferencias de estilos y formas de hacer política, dónde las decisiones más significativas de una coalición tienen tiempos determinados y espacios de resolución colectiva concreta, produce un bumerán de aquello que el FA escribió como verdad absoluta con la mano, y que el tiempo se encargó de borras con el codo.

Mientras en la franja televisiva expresaban: “Si crees que la política se tiene que seguir haciendo en la cocina a espalda de todos. No entiendes nada”.  Hoy la frase desborda al FA y no  existe una respuesta consecuente, que sea coherente con un discurso moralizante expresado reiteradamente en contra de la clase política.

El Distrito 10

A estas alturas, bien vale la pena revisar los números del nuevo Distrito Electoral Nº 10, en cuyo caso se produce  el origen del problema, que involucra a Giorgio Jackson, Alberto Mayol y Natalia Castillo. Lo primero que hay que decir, es que G. Jackson, fue elegido Diputado en el viejo distrito, con 55.060 votos (un 48,17 %). Una muy buena votación, en cuyo caso la Nueva Mayoría (NM), no llevó candidato, cosa que sin duda alguna, facilitó su elección.

En el caso de A. Mayol, obtuvo 106.265 votos en las primarias del FA. Sin embargo, al sumar las comunas del nuevo Distrito 10, sólo logró 15.574 votos. Su mejor votación la obtuvo en Ñuñoa con 4.834 votos y la peor en la granja con 709.  O sea, en parte se cumple aquello que afirma Giorgio Jackson, que Alberto Mayol,  intentó ir en el cupo de Natalia Castillo, para tener una mayor posibilidad de ser potenciado (arrastre le dicen en los partidos) en la lista de Revolución Democrática (RD) y finalmente salir elegido.  Sin embargo, Alberto Mayol, tiene a su favor, haberse transformado en figura nacional del FA y por tanto, no podría quedarse afuera de la coalición por secretaria. Sería la peor versión de la cocina del poder, aunque los cocineros sean jóvenes e inexpertos.

En el tema más nacional, el FA, parece concentrase casi exclusivamente en el Distrito 10, lo que no deja de llamar la atención. A pesar de sus llamados a resolver los problemas generales del país, sus esfuerzos electorales parecen estar concentrados en algunas comunas muy específicas, una tendencia al foco como concepción de desarrollo, que podría complicar sus aspiraciones de partido nacional.

La inmediatez que ahoga

Todos coinciden que está es la primera crisis seria del FA. Lo que nadie sabe es cuánto durará. Dependerá en gran medida de las fortalezas colectivas que demuestren sus dirigentes nacionales.

El FA en su identidad más central presenta una dirigencia relativamente joven, que no registra vivencia de resistencia anti-dictatorial. Para el retorno a la democracia no superaban los siete años.  Vale decir, han participado del mercado y el consumo en su niñez y juventud, pero carecen de vida política y social. Ello podría explicar su poca empatía y escasa generosidad política hacia sus propios compañeros de ruta.

La inmediatez de sus acciones parece ahogarlos en un desborde que amenaza su propia existencia.  Pero la realidad les impone una rápida respuesta para salir de las dificultades y transformar su inexperiencia en una oportunidad para crecer. El país les exige que apuren el tranco, si de verdad se proponen gobernar Chile, en el año 2022.  







Desborde de la multitud y cause constituyente

Desborde de la multitud y cause constituyente   El desborde de la multitud debe tener un cauce constituyente, sin letra chica ni represent...